Confesiones de la directora de la funeraria
Una mujer contó las anécdotas más inolvidables que vivió mientras trabajaba como directora de una funeraria. A lo largo de su trayectoria, vio muchas peleas y crisis de nervios durante los funerales. Además, vio a varias personas tumbar ataúdes por accidente o por culpa de arrebatos emocionales. Suenan como cosas salidas de una película, ¡pero la gente hace estas cosas en la vida real!
Lamentablemente, también fue testigo de gente que intentó entrar en el ataúd o la tumba para quedarse junto al ser querido muerto. Es algo bastante difícil de ver y afrontar, así que la felicitamos por ser tan fuerte. Por último, lo más raro que vivió cuando era directora fue lidiar con un tipo que intentó coquetearle mientras estaba parado delante del ataúd de la madre. No hay manera de que le hayan pagado lo suficiente para soportar eso.