Hora de negociar
Hay un momento y un lugar para todo. En general, un funeral no es el mejor lugar para hablar de negocios. Durante el velorio de la abuela, esta persona escuchó a la tía hablar de dinero con otro invitado. No era una conversación divertida. La tía decía que le quería comprar la casa de la abuela «por dos pesos» a la familia del narrador. No es el momento, tía Barb. En serio.
Cuando alguien muere, es normal que la familia se divida el dinero, los bienes y demás pertenencias del difunto. Vender una casa es parte de dividir la herencia y llegar a un acuerdo luego de la muerte de un familiar. Sin embargo, hablar de finanzas y propiedades durante el funeral es de muy mal gusto.