¿Qué podría salir mal?
Tener un hermano no es más que tener un cómplice a la hora de llevar a cabo todas tus ideas tontas. Estoy segura de que muchos de ustedes entienden eso. Por supuesto que hacer estupideces cuando eres joven es divertido, pero tener un hermano o hermana con quien compartir la adrenalina —y la culpa— hace todo diez veces más interesante.
Dejar a un par de hermanos solos es una receta para el desastre. Te aseguro que encontrarás, al menos, una ventana rota o un sofá manchado cuando llegues a casa. Sin embargo, este padre no tuvo tanta suerte; ¡ya me puedo imaginar la cara que puso al ver su palo de golf clavado en la pared! Espero que estos niños hayan crecido para convertirse en adolescentes tranquilos y que hayan dejado de destrozar palos de golf en casa.