Barbillas pequeñas, años 30
En los años 30, tener una barbilla pequeña se consideraba un estándar de belleza para las mujeres. Como resultado, muchas mujeres hicieron todo lo posible por eliminar la temida papada. Desde dietas extremas hasta ejercicios de mentón e incluso el uso de artilugios como el “Reductor y embellecedor de mentón” del profesor Mack, las mujeres estaban decididas a tener una mandíbula ceñida.
Algunas incluso recurrieron a trucos de maquillaje para crear la ilusión de una barbilla más delgada. El estándar de belleza estaba tan arraigado en la sociedad que provocó un auge de la cirugía plástica para eliminar permanentemente el exceso de grasa y piel de la zona del mentón. Aunque los cánones de belleza actuales se han alejado del mentón delgado y se inclinan por una representación más natural e integradora de la belleza, la obsesión por lograr el aspecto perfecto sigue siendo tan fuerte como siempre.